domingo, 23 de junio de 2013

Con Espíritu Olímpico

LOBOSILLO 2013

Creo que todos los que me seguís o conocéis sabéis que estaba bastante nervioso por esta carrera a la que Juanma Molina me convenció para venir.

A principios de este mes me recuperé de faringitis, poco después, pude conocer a Molina gracias a Runner Enfurecido, un auténtico defensor del corredor popular. Habló conmigo, habló con mis padres y me convenció. Quedaba poco tiempo para prepararse, pero me daba igual, era una espina clavada, parecía sincero y tenía pinta de que iba a estar muy bien organizada, si había alguna forma de superarla por completo era esta, tenía que llegar de pie en esa carrera.

Se lo comenté a mis entrenadores y les expliqué todo, les pareció buena idea.

Así que allá vamos, pasó algún percance con las camisetas del nuevo equipo Runpiña, las piernas, y todo lo que he comentado en entradas previas. Pero ni una pequeña carga, ni problemas con la equipación iban a impedir que fuera y la terminase con una sonrisa.

Mi entrenador, no se si como buen consejo, o para reírse de mi o ambas cosas, me recomendó bañarme el día anterior 15' en hielo, ya que no tenía tiempo para un físio, bueno aquí está la prueba.
Después de una noche en la que le doy el follón a varios amigos por los nervios y la preocupación decido dormir, pero aún así me levanto temprano.

Ropa preparada, a falta de camiseta RunPiña, me pongo la que me regaló mi tío por correr mi primer cross, me ato las zapatillas y es el día, vamos a ello.
Si bien, sabiendo ya con tiempo que no me iba a hacer marca, tenía un reto personal que saldar conmigo mismo y con la dureza de esta prueba. Afortunadamente esta vez hacían 20º menos y era por la mañana. Mi objetivo era llegar a la meta y reventar con todo. No os voy a negar que volver a correr en este pueblo y mas en una fecha cercana, me daba miedo, pero era algo que tenía que hacer y superar, ni el atletismo, ni el pueblo son sólo una anécdota, sino el conjunto de todo lo que sucede, y estaba dispuesto a irme de allí con buen sabor de boca.

MUCHÍSIMO MEJOR ORGANIZADO que la vez anterior, con protección civil a cada esquina, un hospital móvil, ambulancia, un buen par de aspersores refrescantes en el recorrido, abundante agua, hacía humano ese recorrido tan exigente en estas fechas.

A pesar de haberme llevado reloj por primera vez desde el anterior de Lobosillo, a mitad de la carrera descubro que es mejor no hacerle ni caso, prefiero mis sensaciones. En ese momento aún no me puedo creer que la esté volviendo a hacer, como un empezar de nuevo, y a pesar de que el gemelo me empieza a pinchar, le lanzo un chorro de agua y me digo a mi mismo que a un ritmo u a otro, pero que esa carrera la acabo.

Si la primera vuelta la he dado a 23', lo único que no debo es hacerla mas lenta la segunda, y me veía perfectamente capacitado para ello. A pesar de todo Fran debido al calor bajaba, y me dice "sigue tu, es tu carrera". 
Quería que la hiciéramos juntos, pero me mira con un gesto tranquilizador, veo a Sergio delante y voy a ello.
Cuando miro el reloj y veía en que punto me marcaba 32', sabía que no había podium de mi categoría, pero daba igual, estaba disfrutándola como un enano, y un montón de pensamientos positivos acerca de lo ocurrido en mi vida desde el Lobosillo anterior a este. Para mi esta carrera era un logro, al igual que ver tanta seguridad entre las bicis que buscaban a los que no pudieron aguantar la carrera, las ambulancias y todo el despliegue en general.

Queda un Kilómetro, y se me pasa por la cabeza apretar y en pegarle duro. A lo que acabo pensando, para qué, he venido a disfrutarla, voy a saborear lo que queda de ella con gusto, el sufrimiento lo dejaré para otras, aquí quiero saborear cada minuto.

Y por supuesto la recta final, que esta vez si soy capaz de recordarla y pasarla.



No puedo evitar pegar un grito de emoción al llegar, pues lo he conseguido, después de todo lo vivido, está hecho, ya está fuera la deuda pendiente que tenía con esa meta.

A falta de camisetas..
Hemos estado un rato el equipo juntos, finalmente he acabado 4º de mi categoría, en esta carrera, además de la exigencia que de por sí tiene, hay bastante nivel.
Había una bolsa del corredor bastante generosa, tenía hasta una revista de running. El fallo de esa reunión de grupo, ha sido cuando yo con mi inteligencia suprema empleo mi cabeza para abrir el melón de la bolsa cuando aparece Molina. Ha sido maravilloso.

Nos quedamos viendo a los pequeños correr, esos no futuros, sino presentes atletas.
Y se acerca en un momento Molina y me dice que me espere a toda la entrega de premios.

Se ve en el Podium esa categoría Junior que arranca bastante fuerte, y en los Promesas, como no en el puesto nº1 a Antonio José Alarcón.

Entonces aparece Molina de nuevo, y me aparta un segundo de mis amigos, no puedo evitar darle un abrazo, por todo lo que ha hecho por mi.
Se ha portado como un hombre, como un atleta. Ha demostrado claramente que ser un atleta olímpico no es solo buenos tiempos y piernas duras, sino un gran corazón.
Se nota que vive por el deporte, y jamás podré agradecerle todo lo que ha movido por una persona que no conocía de nada y que lo único que tenía en común era la pasión por el atletismo.

Y me llaman para entregarme un premio que llevo esperando desde hace 2 años, una espina clavada que jamás pudo salir del todo y que nunca pudo cicatrizar bien, algo que costó curar, una tirita de apoyo a todo ese tiempo que sufrí hasta volver a ser capaz de ponerme unas zapatillas, una persona que está demostrado que merece y no solo eso que debemos agradecerle ese puesto en La Famu.

Aunque sé que esa persona que aparece abajo a la derecha es la que realmente ha querido entregarme ese premio y una mención especial, ha conseguido que esa persona que hace poco menos de dos años empezó a ignorar mis llamadas telefónicas me entregase ese premio que un día gané.
Hoy ya puedo correr tranquilo, no tengo mas que recuerdos positivos y una muestra de que todo el esfuerzo sirvió para algo. Se que lo estás leyendo, y jamás podré agradecerte todo lo que has hecho por mi, pero que sepas que estoy disponible para todo aquello que necesites para siempre.

Esta es la carrera más simbólica que jamás he realizado, con muchísimo significado y con mayor disfrute a cada zancada.
Cada vez que eche un vistazo a mi estantería no podré hacer más que sonreír, jamás podre evitar este gesto y ese sentimiento.
Una carrera estupenda organizada por La Famu en Lobosillo.

Muchísimas gracias a todo a mi familia, a #RunPiña y a mis entrenadores Aurelio Bello y Juan Carlos Valenzuela.
Y dedicado todo esto muy especialmente a Juanma Molina, que no creo que pueda juntar mas palabras para explicar mi gratitud, y al perfil de twitter de @runerenfurecido, por ser capaz de permitirme conocer a un grande.


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Otros datos de interés de la carrera:

Fui así casi toda la carrera, esto es disfrutarla



4 comentarios:

  1. Me alegra, y no sabes cuanto que lo hayas superado.
    Y que con un par hayas logrado lo que un día te arrebataron.
    Enhorabuena crak!

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    1. Muchísimas gracias Laura, finalmente está demostrado que se puede conseguir todo aquello que te propones

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  2. Carlos me alegra que ya lo tengas superado. Estoy pensando publicar una entrada en mi blog en la que tu formas parte.

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  3. Carlos me alegra que ya lo tengas superado. Estoy pensando publicar una entrada en mi blog en la que tu formas parte.

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